lunes, 24 de junio de 2013

Midsommarfest y El sueño de Homero



Creo que voy a tener que obligarme a escribir un par de veces por semana con fechas fijas para no    descolgarme del blog. Y el título de está entrada hace referencia a las últimas vivencias del fin de semana. Y es que aquí en Suecia se celebra el día 21 Midsommarafton (que viene ser algo como la víspera de la mitad del verano) y en lugar de dar la bienvenida al verano como se hace en el resto de países del hemisferio norte pues se celebra la mitad del verano. Y me da a mi en la nariz que, aunque yo no lo he notado, ya se ha pasado la mitad del verano en Suecia :(. Yo no lo celebré especialmente pero tienen tradiciones muy variadas como la de llevar una guirnalda en pelo hecha con ramas y flores (sólo vi a chicas pero aquí no se va a discriminar a nadie que quiera llevarla sea cual sea su sexo), comer y beber (sobre todo beber ejem) con familia y amigos, levantar un mayo y básicamente celebrar el verano y la fertilidad y esas cosas. Mi recomendación para futuros Midsommarfest es no os quedéis en Estocolmo. Está tomada por turistas!! Los suecos se van fuera, al campo, a la playa o a la montaña y en Estocolmo no queda ni Rita, además hasta bares y restaurantes cierran con lo que es difícil entretenerse.

Y hecho este breve inciso os voy a contar la verdadera razón por la que me he motivado a escribir hoy. Y es que desde hace unos días estoy viendo vídeos en la versión digital de 20minutos que forman parte de un documental llamado 'El sueño de Homero' y quería expresar mi opinión (aunque os de igual) al respecto. Y es que me parece muy bien reflejar las experiencias de todos nosotros (jóvenes y no tan jóvenes, españoles o incluso no españoles) que por unos motivos u otros hemos acabado buscándonos la vida fuera de casa (en otra ciudad, en el país vecino o a miles de kilómetros de distancia) pero no creo que sea de ayuda o incluso un reflejo fidedigno de lo que está pasando. No todos somos jóvenes indignados o sí lo somos pero no creo que en general se emprenda la aventura de mudarte a otro lugar como un movimiento de indignación (como el de 'No nos vamos, nos echan'). Y sí, algo de frustración si tengo o he sentido, sobre todo después de finalizar mis estudios y viendo que con dos idiomas además del español y una titulación superior de Ingeniería Industrial mi lugar estaba en la cola del paro y en casa con mis padres. Pero una vez decidí irme, fue un proyecto que emprendí con ilusión aún no sabiendo como iba a acabar (todavía puedo decir que estoy al comienzo). Para mí es parte de la vida misma, proyectos personales, decisiones que se toman para solventar una carencia o problema en nuestra vida o una aventura. Creo que hay que vivirlo y sentirlo como la posibilidad de ver mundo, conocer otras culturas, aprender (idiomas o lo que sea, ganar experiencia en la vida que es lo que no te enseñan en ninguna universidad o escuela)... Tomar las cosas con optimismo y alegría, y convertir algo que a priori puede parecer una dificultad en una oportunidad. No creo que se pueda ir por la vida sintiéndose indignado y sintiendo que te echan de tu país y que por eso te vas. Igual me equivoco pero la mayoría de la gente que se lo tome así volverá a su casa frustrada y con el rabo entre las piernas. A mí me indigna eso, y me indigno cada día en pensar en la cantidad de gente que deja su casa y a su familia odiando irse, no es una solución para todo el marcharse y ya deberíamos empezar a darnos cuenta.





lunes, 17 de junio de 2013

Survival cooking


 Os dije que no tardaría mucho en escribir y he cumplido. He decidido mostraros mis habilidades culinarias, que las tengo, aunque algo reducidas. Y siempre he pensado que mis habilidades en cuestión de cocina se reducían a lo básico. Vamos cocina de supervivencia, de ahí el título del post. Hasta hace un par de años sobrevivía a base de tuppers de mi madre y a cenas improvisadas que consistían en ensalada o sándwich. Cuando me fui de Erasmus aprendí un poco más pero tampoco nada elaborado. Y ahora estoy en una fase de descubrimiento y experimentación. He adquirido las habilidades básicas y soy capaz de probar recetas diferentes y hasta de añadirles mi toque personal (con mejor o peor resultado).  Así pues ayer fusioné mi cocina de supervivencia con algo de improvisación y me salieron unas Tostas de sardinas de lata con tomate estupendas. Así que he decidido compartir mi super receta con vosotros. Como se trata de improvisar se me olvidó sacarle una foto pero he puesto una de algo que se le parece. (lo siento para la próxima prometo adjuntar documentos gráficos verídicos).


Ingredientes


  • Una lata de sardinas en aceite (un capricho gourmet aquí en Estocolmo)
  • Tomate (de bote triturado o frito)
  • Un poquito de cebolla 
  • Pan 
  • Rulo de cabra
  • Sal
  • Orégano
  • Aceite
Modo de preparación

Se sofríe la cebolla con un poquito de aceite y cuando está pochada se le añade el tomate (yo añadí del triturado), se le añade la cantidad a repartir en dos tostadas grandes. Si es tomate triturado tenemos que rectificar la acidez con sal y una pizca de azúcar. Si lo que tenemos es tomate frito podemos saltarnos este paso e ir directamente al horno.

Mientras se prepara el tomate se tuesta el pan (si lo tenemos de hogaza o pan bimbo).Yo tenía pan de baguette congelado así que corte un trozo lo abrí por la mitad, le eché una gotita de aceite y lo metí al horno precalentado previamente a unos 200º C a que se tueste un poquito. Pero sólo ligeramente, ya que una vez esté listo el tomate lo vamos a volver a introducir en el horno.

Una vez listo el tomate. Se esparce sobre la superficie de nuestras tostadas. Se cortar unas rodajitas muy finas del rulo de cabra y las ponemos por encima y agregamos un poco de orégano. Volvemos a introducir todo al horno (subimos la temperatura hasta 225ºC ) hasta que el queso está fundido y empieza a dorarse.

En ese momento, sacamos del horno y colocamos nuestras estupendas sardinas de lata en aceite sobre las tostadas y lo introducimos al horno para que cojan temperatura. Un minuto, no más puesto que las sardinas ya está cocinadas, el objetivo es que estén calentitas.
 
Y ya está, queda lo más placentero de todo, comer nuestro experimento. 

Pues nada hasta la próxima, espero que lo probéis o que hagáis vuestra propia variante y que me la comentéis o me propongáis cual es vuestra receta habitual de supervivencia, aquella que os sacado más de una vez de un apuro.

jueves, 13 de junio de 2013

Retomando el diario



La verdad es que hace tiempo que no me ponía a escribir pero es que adaptarse a un nuevo país con un idioma raro y diferente con una cultura bastante distinta  a la mediterránea y un clima invernal bastante extremo es más difícil de lo que parecía en un principio. Tanto es así que he decidido cambiar el objetivo de mi blog.

He de decir que durante estos meses no he estado sin hacer nada y por fin aunque por breve tiempo he dejado de ser nini. Después de unos meses intensos de estudiar sueco, mandar currículos y lidiar con la burocracia sueca (todavía sigo en ello), por fin he encontrado trabajo. Bieeeenn!!! Son unas prácticas en una empresa pequeña de energías renovables, pequeña pero prometedora, y la verdad es que estoy muy a gusto. Gracias a ellos que me han dado mi primera oportunidad puedo extender mi aventura por unos meses más aquí en Estocolmo.

Así que puesto que inicialmente comencé a escribir contando mis primeras experiencias (cosa que al final no hice) ahora lo que quiero hacer es escribir un diario de supervivencia. Si de supervivencia, puesto que aunque soy una mujer de mundo que ya he vivido varios años fuera de mi casa, sigo sin estar acostumbrada a hacer ciertas labores...y casi todos los días se aprende algo nuevo. Y también quiero relatar mi aventura aquí. Al final la vida son experiencias y de todo se puede sacar algo bueno. Y la verdad es que Suecia y sobre todo Estocolmo en un día de primavera con sol es increíblemente bonito y como capital tiene muchas cosas que ofrecer.

Me despido por ahora, pero no por tanto tiempo como la última vez.